Mayencos en el
Ama Dablam-Jaca Nepal 2016
Los tres compañeros que intentaban hacer cima en
el Ama Dablam (Manuel, Jesús y Nacho) nos relatan su ascenso por la vía normal.
Como vemos por el relato, ha sido mucho más
difícil de lo previsto debido sobre todo
a las extremas condiciones de frío. El reto de la denominada “Vía Americana”
queda para otra ocasión.
Con la conquista de la cima por parte de David
Orna y su compañera Pilar y ahora la de los tres mencionados podemos decir que
la experiencia en el Himalaya del club Mayencos ha sido fructuosa, porque a
parte de hacer cima en esa hermosa y peligrosa montaña, todos sus miembros
están sanos y si bien aún no están todos en casa, podemos congratularnos de la
experiencia maravillosa vivida este último mes en aquellas tierras lejanas,
duras, muy duras a veces, pero que dejan una huella imborrable en todo aquél
que las frecuenta.
Este es el relato del ascenso:
Después de un largo viaje desde
España con paso por Dubai, Kathmandú y Luckla, y varios días de trekking por el
conocido y bello valle del Khumbu, los 16 miembros del Club Pirineista
Mayencos, llegan el dia 24 de octubre al campo base del Ama Dablam. Diez días
por una parte de disfrute del maravilloso paisaje y por otra de cierta ansiedad
por parte de los expedicionarios por
empezar con su reto.
Tras una emotiva despedida los 13 miembros
del trekking continúan su andadura hacia el pico KalaPatthar, y los otros tres
expedicionarios del club "Nacho, Manolo y Jesús", se quedan allí,
para intentar escalar la mítica y bella montaña.
Al día siguiente comienza un duro
trabajo de aclimatación y porteo de
material hacia los diferentes campos de altura. Durante este largo proceso los
miembros del grupo se adaptan de diferente forma a la altura lo que retrasa la
fecha prevista para hacer cumbre hasta el día
6 de noviembre (14 íias después de llegar al campo base), consumiendo la
mayor parte del tiempo del que disponen para sus objetivos, alcanzar la cumbre
por la vía normal y conseguir una
perfecta aclimatación para después intentar escalar esta misma montaña por su cara oeste, por la vía "Directa Americana
" su principal objetivo. Esto junto a la llegada del invierno, el aumento
del viento en altura y las bajisimas
temperaturas, alejan a todos los alpinistas de sus expectativas de cumbre y a
nuestro equipo de su principal objetivo. Durante este periodo los componentes
del grupo observan como diferentes alpinistas bajan e la montaña con
congelaciones en sus extremidades y también son testigos de dos complicados
rescates con helicóptero a más de 6.000 de altura de alpinistas que han sufrido
casos extremos de mal de altura, lo que pone de manifiesto al difícil reto que
se enfrentan los escaladores.
Tras una tediosa aclimatación y
con la presión de la falta de tiempo y del endurecimiento progresivo de las
condiciones para ascender la montaña, se pone fecha de cumbre. El día 4 de
noviembre se inicia la ascensión al
campo 1 a 5.700 metros , por
camino cómodo pero muy largo donde se salva un fuerte desnivel, hasta el
principio de la arista sureste. A partir de este punto aparecen las verdaderas
complicaciones de la montaña (altitud y dificultad técnica), solamente
minimizadas por el grandioso trabajo de los “sherpas” de altura que cada
temporada instalan una cuerda fija desde este punto hasta la cima.
El segundo día se recorre una
arista rocosa, sinuosa y muy afilada en la cual son necesarias técnicas de
escalada en roca que nos deposita en el espectacular campo 2 situado a
6000m denominado "Nido de
águilas", donde un numero reducido de tiendas hacen equilibrio en
diminutas repisas desafiando a la gravedad, pero con un encanto y localización
especial.
Tras una corta noche se inicia la ascensión hacia la cumbre a las dos de
la madrugada, sumidos en una total oscuridad
solo rota por la luz de los frontales. El terreno se vuelve cada vez más
vertical y puramente invernal, combinando escalada en hielo y nieve con zonas
mixtas de roca. Poco a poco se va ganando altura y con las primeras luces del
alba se llega al gran serac donde en ocasiones se monta el campo tres. Se
superan varios resaltes desplomados de hielo que dan acceso a la parte final de
la montaña. A partir de este punto hace presencia el viento que junto a la
altitud, lo desprotegido de la montaña y
las bajas temperaturas merman las fuerzas de los alpinistas.
Los últimos doscientos metros de desnivel se
hacen especialmente duros, consiguiendo hacer cumbre a las 11 horas del día 6
de noviembre, en una mañana soleada pero muy fría y ventosa.
Tras un breve descanso en la cumbre y
disfrute de las espectaculares vistas que hacen a esta montaña un mirador
excepcional, se inicia el largo descenso, una combinación de sucesivos rapeles
facilitados por las cuerdas fijas que nos depositan en el campo 2, donde
descansamos la noche después de la larga jornada.
A la mañana siguiente recogen todo el
material de los campos de altura y con la pesada carga llegan al campamento
base donde les esperan los dos cocineros, cansados pero con una gran sonrisa en
sus demacradas caras.
Ahora sólo les queda darse una vueltecita por el Khumbu e intentar seguir los pasos de los trekkers sin ningún contratiempo. Que lo disfruten. Namasteeeeeeee¡¡¡¡
Desde el club Mayencos agradecemos a todas
aquellas personas e instituciones, firmas deportivas, etc. que han contribuido sobremanera a que este
espectacular proyecto se haya podido llevar a cabo. Destacamos especialmente al
Ayuntamiento de Jaca y Comarca de la Jacetania , que nos ha permitido llevar el nombre
de la ciudad que alberga a este club tan
lejos y con un relativo gran éxito.
Manolo, Jesús y Nacho en la cima del Ama Dablam. |